La ansiedad se expresa antes en el cuerpo que en la mente. Palpitaciones, tensión muscular, presión en el pecho o mareos son señales de activación del sistema nervioso. Aprende a reconocerlas y a recuperar la calma.
Si tu mente se adelanta siempre a lo peor, no estás solo. La anticipación negativa es una forma de ansiedad que nos impide vivir en calma.