No toda soledad es abandono: a veces es hogar.
La soledad no es una cosa única. Puede ser herida, refugio, miedo, silencio o camino. Muchas personas creen que sentirse solas significa que algo está mal, cuando en realidad existen distintas formas de soledad con diferentes funciones psicológicas.
1. La soledad que duele
A) Soledad emocional
Estás con gente pero no te sientes acompañado.
B) Soledad del vacío interno
No sabes qué necesitas, solo que algo falta.
C) Soledad del abandono no resuelto
Heridas infantiles que aún buscan sostén.
2. La soledad que acompaña
A) Soledad elegida
Espacio para escucharte sin ruido.
B) Soledad creativa
Nacimiento de proyectos, ideas, claridad.
C) Soledad restaurativa
Tu sistema nervioso se regula al bajar estímulos.
3. Cómo saber qué tipo de soledad estás viviendo
Pregunta clave:
¿Esta soledad me drena o me devuelve?
4. Cómo transformar la soledad que duele
- Poner nombre al vacío
- Recuperar vínculos nutritivos
- Ordenar heridas afectivas
- Habitar tu cuerpo sin huir
Para llevarte contigo…
La soledad no es enemigo. Es un espejo. Lo que muestra depende de tu historia.
Psicología de a Pie
En Psicología de a Pie acompañamos procesos donde la soledad pesa, confunde o duele. No estás solo: podemos caminar contigo mientras encuentras tu espacio interior.
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